Cuaderno de Bitacora - Notas y Actualizaciones al Portal de la Bruja

Tuesday, January 13, 2009


LA SANGRE Y LA SONRISA

En la película "1408", basada en un relato corto de Stephen King, el personaje protagonista, un escritor de novelas de misterio llamado Mike Enslin, personaje magistralmente interpretado por John Cusack, se decide a pasar una noche en una habitación encantada de un viejo hotel neoyorquino. A lo largo de una noche interminable deberá enfrentarse a diferentes visiones y apariciones fantasmales. Pero será únicamente la aparición de la imagen de su hija, fallecida a muy corta edad, lo que de verdad llegará a romper su espíritu. El momento de la aparición, con un padre musitando "No eres real, no eres real" culmina cuando Enslin cae de rodillas y abraza al fantasma de su hija.

"¿Quién puede matar a un niño?" La campaña de prensa lanzada por el gobierno hebreo para justificar la matanza indiscriminada de civiles en la Campaña de Gaza resulta especialmente tenebrosa no porque haya millones de personas en nuestro país que estén del lado de Israel y en contra de Hamas (organización por otro lado cuyos métodos y cuyo uso de la guerra civil en el pasado resultan igualmente repugnantes). Al final, la política es la política. No. Se puede estar con un bando o con otro. Se puede justificar una guerra por el control del agua o del petróleo, por mucho que se escandalicen algunos. En el futuro más cercano posiblemente ambas cosas serán una excusa plenamente justificada para ir a la guerra. Sin embargo, lo realmente aterrador es que a esos millones de personas, a los periodistas, a los escritores, a los tertulianos de la TV y de la radio que consciente o inconscientemente, gratis o previo pago, hacen campaña a favor del ejército de Israel, las decenas de niños muertos no les importan nada. Por el contrario, al igual que a los que apoyaron la guerra de Irak (son los mismos), el tema les permite hacer chistes.

De hecho, no se dan cuenta de que al apoyar el argumento de Israel de que los culpables de la muerte de los niños son sus padres por usarlos como escudos humanos, están dando la razón a ETA y a Al Qaeda, que han usado el mismo argumento en multitud de ocasiones. Quizás en el fondo y por mucho que se rasguen las vestiduras, los niños asesinados por ETA y Al Quaeda tampoco les importan. Recordando a Pilar Manjón y a las risas y burlas de que fue objeto en sede parlamentaria, no cabría dudarlo.

El ser humano es un animal. Apenas un poco más complicado que el resto. Y esa complicacion en realidad no es un progreso. Conservamos el instinto cazador, pero el instinto cazador ya no sirve a la supervivencia, sino a muchos y diferentes señores. El mal se ha independizado. Se ha hecho pequeño. Banal. Indiferente.